Las nueces son uno de los alimentos más completos y beneficiosos dentro del grupo de los frutos secos. Su consumo regular se asocia con múltiples efectos positivos para la salud, gracias a su perfil nutricional rico en ácidos grasos esenciales, antioxidantes, fibra, vitaminas y minerales. En este artículo, exploramos en detalle para qué son buenas las nueces y cómo incorporarlas adecuadamente en la dieta diaria.
¿Qué propiedades nutricionales tienen las nueces?
Las nueces se destacan por su alto valor nutricional. Cada porción de 30 gramos (aproximadamente un puñado) aporta:
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Ácidos grasos omega-3 de origen vegetal, especialmente ácido alfa-linolénico (ALA).
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Proteínas vegetales de alta calidad.
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Fibra dietética, que mejora la salud digestiva.
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Vitaminas del grupo B (B6, B9) y vitamina E, con función antioxidante.
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Minerales esenciales como magnesio, fósforo, zinc, potasio y cobre.
Estos nutrientes actúan de forma sinérgica para apoyar distintas funciones del organismo, desde el sistema cardiovascular hasta el sistema nervioso.
¿Para qué son buenas las nueces a nivel cardiovascular?
Una de las razones más documentadas por las que las nueces son buenas es su capacidad para proteger el sistema cardiovascular. Numerosos estudios han demostrado que:
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Reducen el colesterol LDL (colesterol malo).
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Aumentan el colesterol HDL (colesterol bueno).
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Mejoran la función endotelial (el revestimiento interno de los vasos sanguíneos).
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Disminuyen la inflamación sistémica, un factor de riesgo para enfermedades cardíacas.
Gracias a su contenido en omega-3, L-arginina y antioxidantes, las nueces contribuyen a mantener una buena salud del corazón cuando se consumen con regularidad como parte de una dieta equilibrada.
¿Las nueces ayudan a la función cerebral?
Sí. Las nueces son conocidas por su beneficio sobre la salud neurológica. Contienen compuestos neuroprotectores como:
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Ácidos grasos poliinsaturados, que apoyan el desarrollo y mantenimiento de las neuronas.
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Polifenoles y antioxidantes, que ayudan a prevenir el daño oxidativo en el cerebro.
Diversas investigaciones han vinculado el consumo habitual de nueces con una mejor memoria, mayor capacidad de concentración y una posible reducción del riesgo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
¿Son las nueces buenas para el control del peso?
A pesar de ser calóricas, las nueces pueden ser aliadas en programas de control de peso por varias razones:
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Generan saciedad, lo que reduce el apetito y la ingesta calórica total.
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Su fibra y proteínas vegetales ayudan a mantener los niveles de glucosa estables.
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Favorecen una digestión lenta, evitando picos de hambre.
Cuando se consumen en porciones moderadas, preferiblemente como colación, las nueces pueden formar parte de una estrategia efectiva para perder o mantener peso.
¿Qué enfermedades ayudan a prevenir las nueces?
Gracias a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, las nueces ayudan a prevenir diversas enfermedades crónicas:
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Diabetes tipo 2, al mejorar la sensibilidad a la insulina.
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Enfermedades cardiovasculares, como ya se ha mencionado.
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Algunos tipos de cáncer, especialmente el de colon, debido a su fibra y antioxidantes.
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Trastornos neurodegenerativos, gracias a su efecto protector sobre el cerebro.

¿Cómo deben consumirse las nueces para obtener sus beneficios?
Para obtener todos los beneficios de las nueces, se recomienda consumirlas crudas o ligeramente tostadas, sin sal añadida ni azúcares. La porción ideal es de un puñado al día (25 a 30 gramos).
Pueden incluirse en:
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Desayunos, junto a yogur o avena.
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Ensaladas, para aportar textura y valor nutricional.
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Batidos, como fuente de grasas saludables.
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Snacks entre comidas, como alternativa a productos ultraprocesados.
Consejos para conservar las nueces y mantener sus propiedades
Para preservar su frescura y evitar la oxidación de sus grasas, las nueces deben almacenarse en un recipiente hermético, en un lugar fresco y oscuro. En climas cálidos, se recomienda guardarlas en el refrigerador.
Para concluir, si te preguntas para qué son buenas las nueces, la respuesta es clara: son un alimento funcional que aporta beneficios a la salud del corazón, del cerebro, al control de peso y a la prevención de enfermedades crónicas. Su versatilidad en la cocina y su alto valor nutricional las convierten en una excelente opción para incorporar a tu dieta diaria.

Nutricionista | Especialista en TCA y Obesidad